tick-tack

domingo, 27 de enero de 2013

Gurú

Creativo para Géneros Periodísticos III


Caído del cielo

Te conocí hace poco más de cuatro años y aún sigo considerándote parte importante en mi vida por toda la ayuda y soporte que me has brindado.

Desde el principio te mostraste sincero, comprensivo y tolerable. Capaz de sacarme de aquellos días tan oscuros cuando los problemas con mi familia iban en aumento y parecía realmente el final de una no tan bella familia, como esa que siempre se piensa utópicamente.

Poco a poco supiste ganarte mi confianza, yo logré ganarme tu paciencia, tú simplemente me robaste el corazón. Yo te dejé, con mucho temor, amarme como nadie lo había hecho y como sé que nadie lo hará. Me sacaste del hoyo en el que estaba, de ese maldito agujero donde otro hombre, niño en ese entonces, me dejó sin compasión.

Esto quizá suene a carta cursi, como las que los niños de secundaria les hacen a sus amores de “chocolate”, pero en verdad quiero agradecerte pues más que mi novio durante estos hermosos tres años, has sabido ser mi amigo, mi confidente y mi guía.

Confieso que gran parte de lo que ahora soy te lo debo a ti, a tus enseñanzas y a tu singular forma de ser. A tu lado aprendí a combatir mis miedos, alcancé mis metas, logré ser más tolerante y a decir lo que pienso. Sin embargo, lo más importante fue que te ganaste mi confianza y con tu inmenso amor me hiciste sentir protegida y capaz de enfrentar cualquier cosa. Ahora soy fuerte por ti.

Algunas veces, parecieras como caído del cielo pues apareciste en el momento preciso, eras exactamente lo que necesitaba y te quedaste tal y como yo lo esperé.

Podremos tener diferencias, eso le pasa a cualquier persona, no obstante, hemos aprendido a comprender, reflexionar, perdonar y aceptarnos por nuestras virtudes, errores y todos nuestros defectos.

Te conocí hace poco más de cuatro años y aún sigo considerándote parte importante en mi vida por toda la ayuda y soporte que me has brindado.

Así quiero que te quedes,  junto a mí, rescatándome cada vez que me siento perdida. Enseñándome a salir adelante por mi cuenta y a creer en mí. Demostrándome cuán capaz soy y cuán orgullosa debo estar de mi esfuerzo. Tomándome de la mano y llevándome a la paz y tranquilidad que tanto necesitamos.
Amor mío, en pocas palabras, tal y como diría la canción que siempre me cantas: Stand by me.


No hay comentarios:

Publicar un comentario